¿Por qué no volver a ver la vida igual que cuando éramos niños?

Cuando éramos niños veíamos la vida de otra manera.

Poníamos atención constante al presente, y nos nos preocupábamos por el día siguiente o por si nos saldrían bien las cosas. En cambio, al crecer, es todo lo contrario, nunca estamos en el presente y nuestra mente siempre está pensando o imaginando lo que vamos a hacer o va a suceder. Esto nos genera una gran preocupación y ansiedad.

Muchas veces nos decimos que ojalá volviéramos a ser niños para vivir como lo hacíamos. Pero hay que preguntarse, ¿por qué no hacerlo? ¿Por qué no vivir desde esa perspectiva?

Eso no es inmadurez, es afrontar todas las situaciones desde el punto del «aquí y ahora».

Todo ese ruido mental puede desaparecer, y volveremos a tener una vida sin tantas complicaciones. No porque las situaciones y experiencias vayan a cambiar, sino porque las viviremos desde otra perspectiva.

Realizarnos una limpieza energética nos ayudará a conseguir este objetivo, y podremos vivir nuestro día a día, disfrutando como niños.